domingo, 10 de octubre de 2010

Hola, Valencia. I

Barcelona. 7:45. 8/10/10
En el tren hace mucho frio. Yo tengo frio, aquí en el "coche 2" y voy antes que nada a pedir un café de los malos y tan malos, malísimos, pero calentito, por favor. El frio hace que renuncie a mis costumbres. Por eso igual me gusta tanto. No voy a quitarme el pañuelo ni la americana en todo el viaje. He podido limpiar mi habitación y mi baño y dejé la cocina medianamente decente con bolsas nuevas en los cubos. He llegado a tiempo y hasta he podido fumarme un cigarro antes de entrar en el Polo (soy lo más cómo me quiero)


Pero no todo podía ser vino y rosas. Repaso mental :móvil, sí. Libreta, sí. Música, sí. Pero Mr. Robertson - "and here's to you Mr. Robertson, Jesus loves you more than you will know, wop wop wop"- se ha quedado en la estanteria. Tengo las rosas, me falta el vino. Estoy tan sumamente cabreada conmigo misma que entro un poco en calor. ¡Y la "lista Valencia"! Tampoco está aquí. También la he olvidado y no precisamente en mi segunda estantería preferida. La he olvidado y no sé en que rincón. Por no mencionar el significante detalle de que viajaré en asientos de 4, de los de mesa en medio. Puta mierda. Me falta el vino así que acción-reacción- decido releer fragmentos de "El Quinto en discordia" como para fustigarme un poco y le digo al "hombre" de enfrente que baje su música. Lo hago todo lo cortesmente posible disfrazando mi exigencia de petición con un "por favor" y un "le importaría". Y llego a ese momento en el que Dunstan, describiendo al señor Dempster dice que "Ésa es una de las crueldades del teatro de la vida: todos pensamos que somos protagonistas y, cuando se hace evidente que somos simples personajes secundarios o figurantes, raramente lo reconocemos"
Y leo los labios de la mujer de enfrente. Dice gracias. También estaba deseando (normal, joder, normal) no escuchar los hits de turno del vecino. Ya no se oyen y yo vuelvo a tener frio.



-"Las cosas pasan por algo- me decía mi padre"- También me decía -"cuando García Marquez hacía examenes y trabajos no escribía una novela"- Y la primera afirmación también es cierta, señores. Y los que discrepeis podéis azotadme ahora, que sabéis que me encanta provocar. Davies me estará esperando en la estantería y yo volveré a por él.
Y efectivamente, dejé la película pero no el "Público" (qué bien qué bien) ni la "agenda nitidia" Cómo te quiero, Barcelona. Otoño, qué palabra tan bonita. Pienso en "los chicos", es inevitable. ¿Te acuerdas que te dije que te hablaría de ellos, Elefante? Es un buen momento para empezar. La agenda me la trajo Simbi ( odia que le llame así, entre tú, algún visitante esporádico y yo, mi cimpañero de piso Simbad será "Simbi" o "Simb") Las cosas pasan por algo. Si hoy hubiese sido una mañana de Viernes al uso, no tendría ahora una parte de él conmigo. Es extraño porque, dado que olvidé el libro, tampoco debería tener una parte de Pedro conmigo y por un momento es como si estuviera aquí. Como si fuese el hombre de enfrente y no tuviese que haberle pedido que bajase la música sino que me dejase escuchar a través de uno de sus auriculares. Si le imagino de niño, le veo entreteniéndose con juguetes con los que nadie más sabe como jugar. Simb corre por un campo persiguiendo a las niñas. A veces quiero darles las gracias mas a menudo. Pero hablar y escribir no es lo mismo, afortunadamente.

Las cosas pasan por algo y mira tú por donde, Hilary Swan como actriz principal de la película que no he visto pero voy a ver.
Suena el móvil y es Edgar, aquel que -me digo- no habrá tenido que soportar chistes con su nombre. Le contesto que "el próxim no me'l perdo" entre otras cosas. Pondré su cd en el que hasta hace nada llamé "mi bar" (cuan posesivos somos, quién este libre de pecado que tire su piedra) Cd que por cierto no le pagué. Pero no sin antes haberlo escuchado. Le tengo demasiado respeto a la música como para ejercer de "rrpp aficionada" promocionando algo que no me merece ningún tipo de interés, por mucho que lo que me deje indiferente lo haya parido un amigo.
-¡Tus padres!- avísales pero ya- grita Pepito Grillo- que tienen una hija y que no ha perdido el tren ni la maleta ni a si misma- Lo hago. "Cena algo, que llegas a las 11h" Hay cosas que nunca cambiarán y que irónicamente es genial que no lo hagan.
Tengo muchas ganas de verles. Y estoy tan contenta y tan poco cansada. Me muero por abrazar a mi flor, "Roxymusic" follonera. Quiero contárselo y que me cuente todo. Me reiré con y de ella. Se reirá con y de mi. Ambas nos reiremos de nosotras. Y de todo. Iré al bar el Sábado. Cómo me acordaré de Vero cuando pase por los "park" o lea la cartelera de los "UGC" Y qué borrachas vamos a acabar Alba y yo. ¿Cuando veré a Capitán? Le veré en los bares. No hace falta ponerle hora y lugar a según que cosas. Lolita, mis maris. Y Lolita, Mery, Conchi (podrá ver que llevo su dibujo como fondo de pantalla) Hugo (seguro que está guapísimo) Comeremos, beberemos y bailaremos swing.

Me sentaré con Javi. Nos medio perdonaremos sin decir "perdón" y pronto llegará Aaron para enseñarme su nueva colección de sellos. Hablaremos de todo eso que me llega a poner triste pero no podremos estar más alegres. Hasta invitaremos a una copa a nuestra amiga la impotencia. Y a ti, Elefante, voy a mandarte un mensaje en cuanto llegue. ¿Qué estás leyendo? Porque nome creo nada que todavía sigas con el mismo libro, maldito vago, actualiza el blog alguna vez. ¿Sabes que el 70 cumpleaños de Lennon nos va a pillar aquí, en Valencia? Si no te importa haré que te importe. Y todo esto me recuerda una de las cosas que apunté en esa lista perdida vete a saber dónde: "mis discos favoritos de los Beatles en tazas"

Espero que mis abuelas me vean nutrida, bonita y puedan creerme cuando les diga que Pedro cocina que te cagas, que para algo es gallego. ¿Estarán orgullosas de mi, aunque siga sin tener novio formal al que presentarles ni miras de boda y mucho menos de familia tal como la conciben? Tengo 4 días para averiguarlo y disfrutar en el proceso. Caminante no hay camino, se hace camino al andar.

Hola Valencia. ¿Me has echado de menos?




No hay comentarios:

Publicar un comentario