lunes, 20 de septiembre de 2010

Que nos vean caminar por el alambre

Está sonando la canción más bonita del mundo. Una canción, igual que una persona, puede ser bonita y erótica a la vez. Y una persona puede ser también inocente e nteligentísima a la vez. ¿Y sabes que más puede ser, además de todo eso? Vulnerable. Se puede ser vulnerable hasta límites insospechados. Canciones bonitas y eróticas. Canciones y personas. Personas inteligentes, inocentes y vulnerables.
Hemos contestado a la eterna duda. Y la respuesta es que nos vemos caminar por el alambre demasiadas veces. Que nos vean caminar por el alambre. Cuando deberíamos salir a la calle con gafas de sol de marca barata. Las mismas que usamos para pelar una cebolla. Las que usamos para evitar llorar. Que nos vean caminar por el alambre.
Y cuando debíeramos salir a la calle a mojarnos para celebrar el nuevo R&R. Para hacer el amor en algún rincón de un parque. Para que se nos caigan las gafas al suelo. Para volver a casa sin el pañuelo o sin la chaqueta o sin el sujetador y entonces brindar con cerveza. Cuando deberíamos volver a hacer el amor en lugar de lamentar los objetos perdidos. Entonces, pequeña, que nos vean caminar por el alambre. Porque es demasiado tarde y todos somos demasiado viejos. Viejos queriéndo ser jóvenes. Jóvenes queriendo ser viejos. Y ninguno de ambos bandos va a mover un milímetro de su vejez o juventud. Nadie va a mover un milímetro.
Nos hemos respondido de golpe. La eterna pregunta. Podéis mirarnos caminar por el alambre. Y no debéis estar tristes por lo que vais a perderos. No estéis tristes por carecer de una forma de amor a la que poder admirar, de un espejo en el que desear miraros algún día. Yo tampoco lo estoy.
Dylan nos enseñó a quienes quisimos aprender que hay palabras demasiado bonitas. "Adiós", nos dijo, es una de ellas. Hacédle caso. No lo penséis dos veces, está bien así.
Permaneced impasibles. No movais ni un milímetro. Tristeza es otra palabra demasiado bonita. Pero vednos sin embargo caminar por el alambre. Y brindaré con erveza cara y vino barato. Fumaré mis cigarrillos preferidos. Celebrare ésa y todas las canciones. Hablaré con mis amigos. Les echaré de menos. Les abrazaré como si estuviese a su lado. Añoraré los ladridos de mi perro. Llamaré a algún amante. Nos citaremos mañana. Y el sexo será increíble.

No hay comentarios:

Publicar un comentario